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¿Existe una vía legal para la conservación de las especies en Chile?
La gran mayoría de las personas nos sentimos “amantes de las plantas y animales”, o al menos eso decimos en público (o en las redes sociales).
Pero, ¿porqué a veces no prima el sentido común en lo que a protección de la naturaleza se refiere?, entonces, después de hacerme esta pregunta, ¿Bajo qué estructura legal se encuentra protegida la flora, fauna y hongos nativos?

Hagamos una breve reseña histórica:
La conservación de los ecosistemas naturales en Chile comenzó a desarrollarse cuando en el año 1872 se promulga la Ley sobre corta de bosques con el fin, aunque algunos dudan de ello, de reducir la destrucción del bosque nativo. Luego, a principios del siglo XX, para ser más exactos en 1907, se crea la primera área silvestre protegida de nuestro país, La Reserva fiscal Malleco y en 1929 se promulga la Ley de Caza, la cual, a grandes rasgos, no sólo regula la cacería de animales silvestres (indicando fechas de caza y prohibiciones), sino que además incorpora estados de conservación para una alto número de vertebrados e invertebrados terrestres.
Pues bien, durante años, la Ley de Caza nº 19.473 ha sido un instrumento extremadamente útil para poder fiscalizar la caza, y combatir el tráfico ilegal de especies. Es importante recordar que sólo hace unos 20 años atrás comenzó a decrecer rápidamente la exportación ilegal de animales silvestres, esto principalmente a la incorporación de los estados de conservación y a un arduo trabajo de fiscalización por parte del Servicio Agrícola y Ganadero SAG.
En la Ley de caza se especifica claramente qué animales pueden ser capturados a cualquier época del año (principalmente especies introducidas y que son consideradas como dañinas no sólo para los ecosistemas naturales sino que también para la actividad silvoagropecuaria) y cuales tienen una época determinada de caza y con una cuota por jornada (especies nativas sin problemas de conservación).
Esta ley tenía una gran deuda con la fauna silvestre, pues no incluía dentro de las especies dañinas al perro doméstico.
Fue lamentable el lobby que se hizo hace un tiempo atrás para que ésta especie no fuera incluida dentro de aquellas consideradas como dañinas para la biodiversidad, cuando, hoy en día, los perros asilvestrados son una amenaza latente para la fauna silvestre. Por cierto, cuando hablo de perros asilvestrados, nada tiene que ver con tu mascota la cual convive contigo bajo una estructura familiar y con los cuidados correspondientes. Si no que me refiero a aquellos individuos que, generalmente, siendo abandonados a sus suerte en la naturaleza (me recuerda esa frase de la infancia en que nos decían “Fuimos a dejar al bobby al campo para que sea feliz”) terminan “asilvestrándose”, formando manadas que recorren los cerros en busca de todo lo que se mueva.
Espero que en un futuro, en este tema en particular, prime la cordura por sobre las pasiones indebidas.
Una última figura legal que ha sido de gran aporte para el conocimiento y protección de las especies silvestres, ha sido La Lista de Especies Nativas según su estado de conservación del Ministerio del Medio Ambiente. Esta herramienta es utilísima ya que es flexible y dinámica, se va actualizando constantemente y ha sido un gran aporte a la hora de corregir o re enfocar estudios relacionados con grandes proyectos mineros, eléctricos o forestales entre otros. Lo mejor de todo, es que se encuentra al alcance de todos y cada uno de los chilenos en la página web del ministerio, los invito a darse una vuelta por www.mma.gob.cl/clasificacionespecies
Al terminar, una pequeña reflexión: Animales, plantas y hongos son parte importante de una intrincada y perfecta sincronía llamada “ecosistema”, alterarlo, aunque sea mínimamente, puede generar daños directos y colaterales enormes, incalculables y en algunos casos, irreparables.
Entonces, y como siempre, algunos pequeños tips para ser “amables” con la madre tierra:
- Partamos de la base de que fumar es francamente asqueroso, pero si no te puedes aguantar y aunque te mata la conciencia te fumas igual el pucho, GUARDA LA COLILLA, no la tires por ahí.
- Repite conmigo “Sin bolsa por favor”, millones de bolsas plásticas terminan irremediablemente en el mar y se consumidas por tortugas que creen que son medusas.
- Nunca botes una lata de aluminio en la naturaleza, las lagartijas las consideran un excelente refugio, el problema es que cuando sale el sol la lata se calienta demasiado y la lagartija, atontada por el calor, no logra salir de ésta y muere calcinada.
- Nunca pero realmente nunca botes una botella de vidrio en la naturaleza, la posibilidad de generar un incendio es altísima.
- Si vas con un grupo de gente y no hay camino delimitado, no hagan una “fila india”, de esta manera, caminando uno al lado de otro, evitan erosionar un sector determinado.
¿Más tips? Pronto; por ahora un fuerte abrazo a todos, ¡a fotografiar y proteger el mundo!
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